Oficina de enlace del Gran Ayatolá Sayyid Ali Al Sistani (L.M.H.L) en Londres, Europa, América del Norte y del Sur.

El desgarrón (Al enchicaq)

¡En el nombre de Alá, el Compasivo, el Misericordioso!

Cuando el cielo se desgarre (1)

y escuche a su Señor -como debe ser-, (2)

cuando la tierra sea allanada, (3)

vomite su contenido, vaciándose, (4)

y escuche a su Señor -como debe ser-... (5)

¡Hombre! Te esfuerzas con denuedo en encontrar a tu Señor y Le encontrarás. (6)

Aquél que reciba su Escritura en la diestra (7)

será juzgado benignamente (8)

y regresará, alegre, a los suyos. (9)

Pero aquél que reciba su Escritura detrás de la espalda (10)

invocará la destrucción, (11)

pero arderá en fuego de gehena. (12)

Vivía alegre con los suyos, (13)

creyendo que no iba a volver. (14)

¡Claro que sí! Su Señor le veía bien. (15)

¡Pues no! ¡Juro por el arrebol vespertino, (16)

por la noche y por lo que congrega, (17)

por la luna cuando está llena, (18)

que habéis de pasar de uno a otro estado! (19)

Pero ¿qué les pasa que no creen (20)

y, cuando se les recita el Corán, no se prosternan? (21)

¡No! Los infieles desmienten; (22)

pero Alá conoce bien lo que ocultan. (23)

Anúnciales, pues, un castigo doloroso! (24)

Quienes, en cambio, crean y obren bien, recibirán una recompensa ininterrumpida. (25)